Tras la declaración de culpabilidad de Ismael «El Mayo» Zambada, la fiscal general de Estados Unidos, Pamela Bondi, y el jefe de la Administración de Control de Drogas (DEA), Terrance Cole, calificaron el hecho como un «triunfo sin precedente» y una prueba de que «nadie está fuera del alcance de la justicia estadounidense».
En una conferencia de prensa, la fiscal Bondi, alineada con el nuevo vocabulario del gobierno de Donald Trump, se refirió a los delincuentes extranjeros como «narcoterroristas» que amenazan la soberanía y la seguridad de Estados Unidos. Bondi afirmó que la captura de «El Mayo» es una «victoria crucial de la lucha del presidente Trump» para eliminar organizaciones criminales y destacó el uso de la violencia y el tráfico de fentanilo por parte del Cártel de Sinaloa.
Por su parte, el jefe de la DEA, Terrance Cole, proclamó que «hoy comprobamos que nadie está fuera de nuestro alcance» y resaltó que la agencia ha capturado a figuras como «El Chapo», Genaro García Luna y Rafael Caro Quintero. A pesar de que la conferencia se realizó con la presencia de altos funcionarios estadounidenses, ninguno de ellos agradeció o reconoció públicamente la cooperación bilateral de México en el caso hasta que un reportero lo cuestionó. En respuesta, Bondi agradeció a las autoridades mexicanas «por su ayuda».