El desfogue de la presa Zimapán ha llegado a su fin. Después de seis días de operación, las compuertas se cerraron ayer a las 8 de la mañana, según informó Luis Alberto Vega Ricoy, vocal ejecutivo de la Comisión Estatal de Aguas (CEA). Se espera que el suministro de agua potable a las más de 300 colonias afectadas por el cierre temporal del sistema Acueducto II comience a normalizarse entre la tarde del sábado y el domingo.
El gobernador Mauricio Kuri González reconoció que este viernes y sábado serán los días más difíciles para los ciudadanos, pero aseguró que las acciones de desfogue se llevaron a cabo de forma ordenada y con previo aviso, lo que ayudó a mitigar el impacto. El mandatario también destacó la estrecha coordinación entre la Comisión Nacional del Agua (Conagua), la CEA, los municipios y el gobierno estatal.
Kuri González afirmó que se dará seguimiento a las quejas de los ciudadanos que tuvieron que comprar pipas de agua y se evaluará la posibilidad de otorgar apoyos extraordinarios. El objetivo, reiteró, es restablecer el servicio lo antes posible y acompañar a las familias afectadas.
