La actriz Kate del Castillo rompió el silencio sobre uno de los episodios más polémicos de su vida: su encuentro con Joaquín “El Chapo” Guzmán. En una reciente entrevista, la protagonista de La Reina del Surreveló los momentos de incertidumbre y la intensa vigilancia de las autoridades estadounidenses que enfrentó, confesando que no sabía si en cualquier momento sería arrestada.
La actriz regresó a México en 2018, pero antes de eso, su encuentro con el líder del Cártel de Sinaloa no solo generó un escándalo mediático, sino que también desató un exhaustivo seguimiento por parte de la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés).
El Origen de un Proyecto Cinematográfico
La relación entre Del Castillo y El Chapo se inició en 2012, cuando la actriz le envió una carta pública en redes sociales. El mensaje llamó la atención del narcotraficante, quien posteriormente la contactó para manifestarle su deseo de que ella produjera una película sobre su vida.
Según Del Castillo, el plan inicial era viable porque Guzmán se encontraba en prisión. Sin embargo, su fuga alteró el acuerdo y derivó en la reunión presencial del 2 de octubre de 2015 en Sinaloa, un encuentro al que también asistió el actor Sean Penn. La actriz, quien llevó regalos como una botella de su tequila y libros de poesía, narró que el propósito era establecer una conexión personal con el capo.
Años de Incertidumbre y Vigilancia Constante
La publicación de la entrevista de Sean Penn en la revista Rolling Stone expuso la reunión, lo que provocó una investigación legal contra Del Castillo en México por presuntos fondos ilícitos. A partir de entonces, la actriz se autoexilió en Estados Unidos por temor a ser detenida.
Durante ese tiempo, Del Castillo confesó que la DEA la mantuvo bajo constante observación. “Había momentos en que me decían, ‘Es que viene la DEA’…”, relató la actriz. La incertidumbre sobre si sería arrestada en cualquier momento la llevó a un profundo desgaste emocional y profesional.
A pesar de que el proyecto cinematográfico nunca se realizó, el episodio marcó un antes y un después en su trayectoria. La actriz admitió que fue una experiencia que la acompañará por el resto de su vida, una que la obligó a seguir adelante sin detener su carrera.