El coordinador General de Política y Gobierno, Arturo Zaldívar, fijó la postura del Ejecutivo federal respecto al polémico artículo transitorio de la reforma a la Ley de Amparo aprobada en el Senado, el cual generó controversia por una posible aplicación retroactiva.
Zaldívar subrayó que la posición del Gobierno federal es contraria a avalar una disposición que sea inconstitucional. Por ello, enfatizó que la presidenta Claudia Sheinbaum no impulsa ni respalda leyes que permitan aplicaciones retroactivas cuando la Carta Magna lo prohíbe expresamente.
El Transitorio es Confuso, pero No Busca Revertir Etapas
Zaldívar reconoció que la redacción del artículo primero transitorio en la minuta del Senado «es confusa» y da lugar a interpretaciones sobre la aplicación de la ley a procedimientos legales en curso.
A pesar de la ambigüedad, el coordinador aclaró que la intención del gobierno no es revivir o revertir etapas procesales ya concluidas:
- Lo que NO se pretende: No se van a revertir suspensiones otorgadas bajo la ley de amparo vigente que ya «causaron estado» (es decir, que ya son definitivas).
- Lo que SÍ se pretende: Se pugna porque la nueva ley aplique en las sucesivas etapas de los juicios en curso.
«No estamos de acuerdo con la aplicación retroactiva de la reforma, por ello exhortamos respetuosamente para que se aclare este artículo transitorio. Que quede claro que no se aplicará para etapas anteriores, que ya no se tocan, sino a las etapas posteriores,» puntualizó.
Petición de «Claridad Contundente» a Legisladores
Zaldívar solicitó a los legisladores de la Cámara de Diputados que la redacción definitiva sea con una «claridad contundente», incorporando una disposición expresa que indique que en las etapas procesales se respetarán los derechos adquiridos, rigiéndose por las normas vigentes al momento de la actuación.
Según la jurisprudencia, las actuaciones posteriores a la entrada en vigor de la reforma ya se regirán por las nuevas normas, pero las etapas procesales ya concluidas no serán afectadas.
