El actor hawaiano David Hekili Kenui Bell, recordado por su participación en la versión live action de Lilo & Stitch, falleció el pasado 12 de junio en la Isla Grande de Hawái a los 46 años. Dos meses después, el informe forense confirmó que la causa de su deceso fue una combinación de padecimientos graves: insuficiencia respiratoria aguda, sepsis, cardiopatía hipertensiva y aterosclerosis. También se señaló obesidad mórbida, dermatitis por estasis y edema, condiciones que complicaron aún más su estado de salud.
De acuerdo con el reporte, Bell había presentado problemas para respirar antes de morir. Los paramédicos intentaron reanimarlo aplicando maniobras avanzadas, entre ellas desfibrilación, administración intravenosa y el uso de una aguja intraósea en la pierna izquierda. El examen toxicológico descartó la presencia de alcohol o drogas en niveles significativos, y el caso fue catalogado como “del forense”, sin señales de actividad delictiva.
Bell fue hallado sin vida en su residencia en Hawái, después de que familiares no lograran comunicarse con él. La noticia se difundió públicamente el 15 de junio, cuando su hermana, Jalene Kanani Bell, publicó un emotivo mensaje en Facebook: “Mi dulce, generoso, talentoso, divertido, brillante y apuesto hermanito David H.K. Bell pasará hoy el día en compañía de nuestro Padre Celestial”.
Su representante, Lashauna Downie, manifestó su sorpresa al enterarse por redes sociales: “Era uno de mis mejores talentos y encarnaba el verdadero significado de aloha… un gigante gentil”. El funeral se llevó a cabo el 9 de agosto en la iglesia católica Annunciation Catholic Church de Waimea, donde familiares, amigos y vecinos se reunieron para rendirle tributo.
Nacido el 10 de enero de 1979 en Hawái, David Hekili Kenui Bell creció inmerso en la cultura isleña que siempre defendió con orgullo. Estudió en Kalani High School, Hawaii Community College y Kapiolani Community College. Durante años, trabajó como asistente de supervisión en el Aeropuerto Internacional de Kona, donde su cálida voz daba la bienvenida a miles de turistas.
Su carrera actoral incluyó apariciones en Hawaii Five-0 (2014) y Magnum P.I. (2018–2019), pero su papel más recordado llegó en 2025 con el remake de Lilo & Stitch, donde interpretó al “Gran Tipo Hawaiano”, protagonista de una escena cómica con helado que se convirtió en símbolo del humor y la calidez isleña. Bell también había filmado escenas para The Wrecking Crew, cinta en postproducción protagonizada por Jason Momoa y Dave Bautista.
Aunque no existen registros públicos sobre si estaba casado o tenía hijos, su hermana compartió que David fue un hombre profundamente generoso, divertido y entregado a su familia. Lo conoció a los 18 años, durante su graduación de preparatoria, y desde entonces mantuvieron un vínculo cercano lleno de amor incondicional. Bell fue además embajador de Kona Brew y disfrutaba viajar, hacer doblaje de voz y compartir tiempo con su perro Brutus.
Su última aparición pública fue en el estreno de Lilo & Stitch en Kapolei, donde celebró junto a su familia y mostró imágenes detrás de cámaras en redes sociales. “Nuestro equipo local se merece tanto o más reconocimiento que los protagonistas”, escribió en una publicación, reflejando su humildad y orgullo por sus raíces.
La partida de David Hekili Kenui Bell dejó un vacío tanto en la pantalla como en el corazón de quienes lo conocieron. Su vida fue un testimonio del espíritu aloha: generoso, cálido, auténtico. Aunque su carrera apenas comenzaba a ascender, su legado trasciende los créditos cinematográficos. En una industria que a menudo ha representado a Hawái desde la distancia, Bell fue una voz genuina, un rostro verdadero, un hijo de las islas que llevó su cultura al mundo con dignidad y alegría.
“No era solo un actor. Era un pilar en su comunidad. Un gigante gentil que nos enseñó a recibir con el corazón abierto.” Lashauna Downie, representante de Bell.
