El papa León XIV realizó este miércoles un “fuerte llamamiento” al cese inmediato de los combates en la Franja de Gaza, exigiendo a la comunidad internacional, a las autoridades israelíes y a las partes enfrentadas que pongan fin al conflicto que ha causado sufrimiento y destrucción en Tierra Santa.
Durante una audiencia general, el pontífice reiteró su llamado a la liberación de todos los rehenes y a que se facilite el acceso seguro y sin restricciones de la ayuda humanitaria. El papa insistió en la “obligación de proteger a los civiles” y prohibió el «castigo colectivo» y el «uso indiscriminado de la fuerza».
Su mensaje se suma a la declaración conjunta del Patriarca griego ortodoxo y el Patriarca latino de Jerusalén, quienes han instado a Israel a detener el plan de desplazar forzosamente a la población de Gaza. Las iglesias católica y ortodoxa mantienen refugios para civiles en la ciudad, donde el clero y las monjas han decidido quedarse para brindar protección humanitaria.
