La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo afirmó que su gobierno mantendrá una política de «cero impunidad» tras la reciente detención de 14 personas vinculadas a una red de «huachicol fiscal». Entre los detenidos se encuentran empresarios, funcionarios de aduanas y elementos de la Secretaría de Marina (Semar), lo que demuestra un alto nivel de complicidad.
El operativo es parte de una estrategia federal contra la corrupción y el contrabando de combustibles, y se derivó del decomiso de más de 10 millones de litros de diésel en el puerto de Tampico, Tamaulipas, en marzo pasado.
Sheinbaum explicó que el modus operandi de la red consistía en introducir combustible al país sin pagar impuestos para luego revenderlo a gasolineras y flotillas con permisos legales.
La investigación, que se inició hace dos años, fue impulsada por el entonces titular de la Marina, José Rafael Ojeda Durán, quien presentó denuncias sobre presuntas irregularidades dentro de la institución. La colaboración del exsecretario fue clave para que la Fiscalía General de la República (FGR) pudiera recabar pruebas e identificar a los implicados.